Castillos de cuento de hadas, exuberantes campos verdes y pueblos que huelen a la Edad Media: ¡la Romantische Strasse es una ruta que no debe perderse!
La Romantische Strasse, zona mágica del Alemania, Se trata de una ruta de unos 360 km entre campos verdes y pueblos mágicos llenos de lugares que huelen a la Edad Media. ¿Por qué no condimentarlo todo con un poco de aventura caminando en camper? Dicho y hecho, vamos.
1. El castillo de Neuschwanstein
Tuve el placer de vivir esta experiencia a principios de noviembre y mi consejo es que te organices con ropa de invierno, ya que el clima de esas zonas no es muy suave.
La etapa inicial y fundamental de este camino es la Castillo de Neuschwanstein, construido por Ludwig II e identificado como un símbolo de Disney. A los pies del castillo hay un cómodo aparcamiento de pago donde puede dejar su vehículo y continuar a pie, en minibús o a caballo. La ruta no es empinada, quizás un poco larga, pero se puede recorrer fácilmente a cualquier edad.
La visita guiada al castillo cuesta 13 € y la entrada solo se puede adquirir en la taquilla a los pies del castillo. Esta visita lo catapultará a habitaciones amuebladas como en el momento de la construcción en 1886, con materiales de alta calidad.
Continuando por la Romantische Strasse, pasa por pueblos caracterizados por casas con techos puntiagudos y tonos pastel, vasto campo verde y granjas. Estas características son adecuadas para un viaje relajante y emotivo, especialmente al atardecer, donde las luces de los pueblos de las colinas iluminan el ambiente.
2. Schongau: ciudad medieval
No debe perderse Schongau: una ciudad medieval rodeada de murallas. Tu posición, a lo largo de las orillas del río Lech, lo caracteriza con fuentes y arroyos. La ciudad mantiene una notable historicidad y el recorrido por las murallas destaca varias épocas, alternando casas de la época gótica a casas de la época rococó bávara.
3. El sugerente Nördlingen
Si le gustan las historias sobre desastres naturales no puede perderse el visita a la ciudad de Nördlingen, construido sobre el cráter de un meteorito que cayó hace millones de años. Es la única ciudad alemana que tiene paredes totalmente intactas con hermosos nichos y trabajos decorativos.
4. El famoso Munich
En el camino de regreso es posible hacer un pequeño desvío en la ruta para hacer una parada en la joya de Baviera, Munich. A las puertas del centro de la ciudad se encuentra Campingplatz Munchen Thalkirchen: conveniente dejar la camper y caminar a los principales lugares de la ciudad, tomar una excelente bebida cerveza en la Hofbrauhaus, una fábrica de cerveza histórica muy famosa.
A lo largo de la Romantische Strasse, como en la mayor parte de Alemania, es muy fácil encontrar parques de caravanas equipados con puntos de descarga y columnas donde, con unos pocos euros, es posible recargar tanto la luz como el agua. Los caminos son anchos, evitando tener que realizar maniobras torpes y complejas.
El concepto de llevar la casa estilo caracol de la caravana te permite llevar a cabo viajes de bajo costo.
Último consejo: en Alemania es una buena idea comprobar adecuadamente si existe una diferencia significativa entre el servicio de mesa interno y externo, a menudo ocurre encontrar cuentas inesperadamente altas porque no se ha prestado atención a este detalle. Si también le gusta disfrutar de comidas rápidas mientras viaja, definitivamente debería probarlo pretzels y carne seca, una combinación muy común de las áreas bávaras.