La Turkish Airlines, admitió haber eliminado el bebidas alcohólicas de los menús de la mayoría de los vuelos nacionales y de aquellos a ocho países islámicos. La aerolínea de bandera es en un 49% de propiedad estatal y solo se encontrará alcohol en vuelos de negocios. La razón oficial no es la religión, por supuesto, sino el hecho de que la gente no pide bebidas alcohólicas.
El alcohol no es la única novedad, ni siquiera los nuevos uniformes de las azafatas, faldas 15cm por debajo de la rodilla e impermeables islámicos hasta los tobillos, tejidos rojos y azules de estilo otomano, contribuyeron a la nueva imagen de la aerolínea. El tema aterrizó en el Parlamento donde se habló de daño de la imagen de Turquía. Un diputado agregó: "Una empresa que se presenta como una marca mundial y como la mejor de Europa no puede rechazar la solicitud de alcohol ni siquiera de un solo pasajero".
En los años 60 y 70 el las minifaldas reinaban entre las azafatas de los turcos y también en las calles de muchas ciudades turcas y nadie se escandalizó. De hecho, fue un signo de libertad. Hoy, sin embargo, las mujeres que usan el velo están creciendo y Erdogan ha logrado levantar la prohibición de usarlo en universidades, escuelas y ceremonias públicas. En resumen, la Turquía secular de Ataturk se está convirtiendo cada vez más en una cosa del pasado.
