Cuando viajo a una capital extranjera por unos dĂas, lo primero que pienso es cĂłmo ver tantas cosas en el menor tiempo posible. Si tambiĂ©n puede ahorrar mucho, mejor. A mediados de enero me encontrĂ© en un anuncio Helsinki. No era la primera vez pero teniendo que seguir algunas actividades que me llevarĂan quiĂ©n sabe a dĂłnde, elegĂ moverme con el tranvĂa por el medio dĂa libre que tenĂa.
Por lo general prefiero caminar, pero dado el frĂo intenso de los dĂas que estuve allĂ (hacĂa -13 °) preferĂ el calor que prueba la eficiencia finlandesa en el transporte pĂșblico. AsĂ que partiendo de la parada de Hakaniemi, a tiro de piedra del hotel donde me alojaba, tomĂ© el lĂnea 7a y luego el 3 lo que me llevĂł cerca de los principales monumentos de la capital como la blanca catedral luterana y cerca de las principales plazas y lugares comerciales como Stockmann, una especie de Harrod's.
Helsinki ciertamente no es una metrĂłpolis, sin embargo, es bastante grande y tiene un vehĂculo cĂłmodo como el tranvĂa no estĂĄ mal. Todos los que utilizan este servicio pĂșblico disponen de una tarjeta magnĂ©tica para pasar un lector presente en cada tranvĂa o autobĂșs de transporte pĂșblico. No solo eso, la mayorĂa de los tranvĂas tienen wi-fi interna que te permite navegar gratis y los boletos tambiĂ©n se pueden comprar vĂa sms al nĂșmero 16355. O puedes comprarlos directamente al conductor. Viajando por Helsinki, un viaje sencillo cuesta 2,80 âŹ, 8 ⏠por dĂa completo, 2 ⏠por 12 dĂas, 3 ⏠por 16 dĂas. El costo puede parecer elevado, pero la puntualidad de los medios es excepcional.