Il Kenia ofrece un mar fabuloso, de un azul intenso que combina a la perfección con el blanco de las largas playas de arena delicada y polvorienta como el talco, y cuanto más te mueves hacia el sur y te acercas a Tanzania y estas playas se vuelven más salvajes y frecuentadas por los lugareños. Llegamos a Diani: un mar prístino y un resort frente a la playa es todo lo que hay para la mayoría de los turistas occidentales. Y en cambio Diani ofrece mucho más!
En realidad, lo que se define como “nada que ver” es una oportunidad que debe actuar como un estímulo para descubrir el territorio, la gente, las tradiciones que están ahí al alcance nada más pasar el paseo turístico.
Prepárate para caminar y sumergirte en la exuberante naturaleza de la región costera, toma un matatu (un minibús tradicional) hacia Kwale, el primer centro habitado un poco estructurado en el interior al sur de Mombasa, donde pedirá indicaciones para llegar a SHIFOGA, accesible a pie. Si, por el contrario, no te atreves a lanzarte de cabeza a las costumbres locales, reserva un taxi y déjate dejar frente a la sede de la asociación. Asociación de guías forestales de Shimba Hills (SHIFOGA de hecho). Allí encontrará guías que, entre las diversas actividades, pueden acompañarlo en un mini safari en la Reserva Nacional Shimba Hills o al Santuario de los elefantes. Aquí es donde tienes que pedirles que te lleven.
Después de aproximadamente una hora y media de caminata (las distancias en África se miden de la siguiente manera: tiempo de viaje) durante la cual te involucrarás en las historias de tu guía local, comenzarás a almacenar imagenes de tierra roja, chozas de barro y techos de hojas de palma, niños y mujeres triturando maíz en los corrales, vastas extensiones de palmerales y prados, te sentirás menos turistas y más cerca de la verdadera esencia africana. Es este camino el que te preparará para comprender el majestuoso paisaje que, más allá del último cerro, se alzará frente a ti: el Santuario de los Elefantes, un inmenso valle verde atravesado por un río que crea una curva en forma de U digna de las imágenes documentales más famosas. Entre la vegetación podrás atrapar grupos de elefantes (hembras y cachorros) opuestos a elefantes solitarios (machos) y será agradable admirar su comportamiento y movimientos lentos.
Un lugar de reflexión, silencio, respeto, infinito. Un lugar donde se puede sentir el aliento de África y donde no es raro encontrarse con gente de Kwale que llega a pie para charlar con amigos o para encontrar un poco de paz y serenidad para alentar decisiones y elecciones.
Te quedarías allí durante horas, te lo aseguro. Imposible escapar de la sensación de calma, tranquilidad y vaciamiento de la mente.
Esta es la África que conquista, aquella con la que no entras en contacto por permanecer encerrado en la villa turística, aquí encuentra sentido su HAKUNA MATATA, aquí te sentirás regenerado y listo para caminar de regreso a Kwale y luego de regreso a las vacaciones en la costa, ¡pero con un corazón mucho más rico!