En el Ășltimo minuto, en el verdadero sentido de la palabra, elegimos Genova como el objetivo de este puente de Todos los Santos acaba de gastar. CrĂ©ame, mĂĄs de Ășltimo minuto que esto muere, tanto que a la altura de Bolonia un hotel finalmente responde que tiene un pequeño apartamento gratis.
SĂ, decidimos irnos de todos modos, convencidos de que todavĂa encontrarĂamos alojamiento a cualquier precio. Pasamos toda una mañana en la web entre ofertas (si queremos llamarlas asĂ ...) y las webs mĂĄs clickadas para buscar alojamiento en el centro de GĂ©nova que no nos arrancaban, pero estaba todo lleno, incluido el Estructuras de estrellas mĂșltiples.
Fracasado el intento con al menos cuarenta llamadas telefĂłnicas, salimos de todos modos a las 12 y pasados ââunos cincuenta minutos los dueños del hotel Chopin nos llaman para confirmar disponibilidad.
Es la primera vez que voy a GĂ©nova por dos noches, hasta ahora solo se han tocado y vuelo de trabajo. Una vez debajo del hotel, la primera tarea difĂcil es encontrar una plaza de aparcamiento. Lo encuentro justo en frente de la entrada, lĂneas azules, pero 1 es una fiesta, asĂ que no pagas. El problema fue al dĂa siguiente, sĂĄbado, donde pasĂ© la belleza de 8 a 20 27,50 EUR. Conozco al menos dos cobertizos cercanos, pero necesitaba encontrarlo cerca del hotel tambiĂ©n para el cochecito de bebĂ© y contando que el dĂa siguiente todavĂa era feriado, funcionĂł para mĂ. El pago en el hotel es por adelantado, asĂ que leo los carteles detrĂĄs de la recepciĂłn.
Es una estructura de dos estrellas, dentro de un edificio muy antiguo que ve las primeras piedras colocadas en 1200, eso me dicen. Ya han comenzado la renovaciĂłn interna de algunas habitaciones y ya desde la misma web del hotel se pueden ver algunas habitaciones. Sin embargo, es un hotel decente y satisfizo mi necesidad de estar a tiro de piedra del centro y delAcuario de GĂ©nova. El alojamiento estaba entonces en el Ășltimo piso (con ascensor) y disfrutĂ© de la vista de toda la ciudad y el puerto viejo. Les garantizo que despertarse temprano por la mañana y ver el puerto como iniciaba nuevamente su actividad y ver el lento atraque de los enormes cruceros hizo cierto efecto.
El mobiliario de mi apartamento era de los años ochenta, sencillo, pero aĂșn asĂ cĂłmodo y perfecto para las necesidades de quienes estĂĄn en GĂ©nova de pasar todo el dĂa fuera, teniendo la comodidad de volver cuando y como quieras.
El desayuno no estaba incluido en el precio, pero para nosotros hicieron una excepciĂłn, de lo contrario me hubiera gastado 5 euros mĂĄs por persona. El hotel se encuentra en el ĂĄrea de las facultades de humanidades de la Universidad de GĂ©nova y estĂĄ adjunto a la estaciĂłn de tren Genova Principe. Yo dirĂa estratĂ©gico, tambiĂ©n porque desde la plaza de la estaciĂłn era posible tomar buses a diferentes destinos.