Para los amantes de la naturaleza en Val di Non, entre las muchas posibilidades que ofrece esta zona, se puede visitar un lugar mágico y aventurero: el Cañón Rio Sass, un profundo desfiladero que divide en dos el pueblo de Fondo, creado por las corrientes de agua del Río Sass.
Desde 2001, cuando el cañón se hizo accesible y abierto a todos, existe la posibilidad de caminar por pasarelas y escaleras, admirando un fantástico espectáculo de rock, agua y juegos de luces. Caminando los 800 metros que caminé vi cascadas y chorros de agua que venían de todas partes, paredes que de repente se tensaron obligando a pasar de lado, abismos que se abrían bajo tus pies rayos de luz reflejados sobre las rocas relucientes, ¡una vista que no puede dejarte indiferente!
Este sugerente e indescriptible camino es también accesible para niños, que seguramente quedará fascinado y asombrado, pero ciertamente no es recomendable para quienes sufren de vértigo. La visita siempre está guiada por expertos que, tras haberte equipado con capa y casco, podrán explicarte la historia de la cañón y algunas curiosidades.