Doscientos grados es una famosa sándwich romana, donde se combinan tradición e inventiva. Se encuentra en el corazón de Roma, Piazza Risorgimento, a tiro de piedra del Vaticano y desde hace algún tiempo se ha convertido en un punto de encuentro.
Puede que pienses que es como dicen en Roma "er normalmente paninaro", pero como romano te garantizo que no es así. Los ingredientes con los que elaboran sus productos son muy frescos y de primera calidad, mientras que su pan… es fabuloso. Se elabora con un procesado particular y la cocción se realiza a 200 °, de ahí el nombre del lugar. Los precios no son muy altos. 4,50 euros para subir, obviamente según el sándwich que elijas.
Existen más de 60 tipos de bocadillos, que toman su nombre de los lugares característicos de la capital como el Coliseo, Trevi o el bocadillo Testaccio. A pesar de esta gran elección, siempre puede decidir personalizar su sándwich. Doscientos grados además de sándwiches salados, también produce una amplia variedad de ensaladas, postres y sándwiches dulces.
El lugar no es muy grande y en horas punta es difícil encontrar asiento, pero permanece abierto hasta altas horas de la noche. En mi opinión, es el lugar perfecto para hacer una pausa antes de seguir visitando Roma. Horario de apertura: lun - dom. 9.00 a 1.30 h.