Tengo que decir la verdad La Limonaia de Roma No me llamó la atención su pizza, sino la ubicación y el entorno. La Limonaia se encuentra en via Spallanzani 1 en un hermoso edificio: Villa Torlonia.
También es interesante conocer la historia del lugar que en la década de XNUMX se convirtió en la residencia oficial de Benito Mussolini que pagó una renta anual simbólica de una lira. Mussolini y el príncipe Torlonia construyeron un refugio contra los bombardeos en las catacumbas judías que estaban ubicadas debajo de la villa. Afortunadamente, en los años siguientes la Villa fue comprada por el Ayuntamiento de Roma que hizo una parque publico.
La Limonaia es bastante grande, el interior tiene un techo muy alto, sillas y vasos de colores y un excelente menú aunque un poco caro: un pizza elaborada cuesta unos 10 €. El exterior está dividido en dos jardines a pesar de que estaba lloviendo la noche que fui, así que no pude explorarlos.
Entre las pizzas probé 3, como se puede ver en la foto :) La Limonaia hecha con calabacines y jamón crudo, una pizza gorgonzola y mota y una pizza radicchio y provolone. Las pizzas son definitivamente buenas aunque no sean las clásicas romanas porque no son bajas sino un poco por encima de la media en cuanto a altura.
El único inconveniente en mi opinión, es el personal. Muy amable y atento a los detalles, pero… demasiado. En una sala había al menos una docena de camareros para 50 asientos. A decir verdad no conozco las cifras pero el sentimiento era el de estar rodeado de camareros que para ser honesto no tenían nada que hacer. Si les parece bien :)