Ser asesorado es siempre lo mejor de las cosas, especialmente sobre "dónde comer". Así tuve el placer de ir a cenar por Cyprian, en el país de Calavino, en Trentino.
El consejo fue: si quieres comer cosas locales, y a un precio honesto, ve a Cyprian, siempre vamos allí, puedes comer cualquier cosa. Dada la zona, tuve la tentación de ir al Arco di Trento a comer carne salada, pero el consejo me pareció tan sincero y sentido que no tuve el valor de dejarlo caer al vacío.
El restaurante da Cipriano, que pronto descubrí era también recomendado por la Guía Michelin, parece una típica trattoria "de montaña", cálida y acogedora, con no pocos asientos, pero bien fragmentada en diferentes estancias para mantener el ambiente reservado y familiar.
Cipriano, el dueño del fac-totum, es un simpático caballero que viene primero en darte la bienvenida, rigurosamente vestida de una manera muy elegante y cuidada. No hay lista de menú en las mesas, quizás también porque el placer de contarte sus platos no quiere ceder a hojas de papel ...
Es así que al elegir entre 4 primeros platos espléndidos y acogedores (bolas de masa, risotto con boletus y trufas, strangolapreti con espinacas y ravioles con achicoria y speck) Me dejé convencer, con mi posterior gran satisfacción, de llevarme el plato de degustación, un póquer de los 4 primeros platos, para no te pierdas alguno! Y habría sido un crimen.
Como segundo opto por uno corte, muy delicado, pero tuve que renunciar a un guiso de venado, una trucha a la parrilla y no recuerdo qué más.
Durante la cena pedí un vaso de vino a granel, que esperaba que sirviera como jarra o que se trajera directamente a la mesa. Para mi agradable sorpresa, en cambio me sirvieron una botella de vino a granel, etiquetada con la personalización "selección de restaurante de Cipriano", de la cual decidir cuántos vasos verter. Y aquí también, desde el vaso preguntado, fui a dos.
Los postres no los he probado, pero las reseñas que he leído después hablan igualmente bien de ellos. Será para el próximo.
La mejor sorpresa, sin embargo, la reserva la cuenta. Después de una cena de tal calidad y un servicio de primer nivel, combinado con los "consejos Michelin", te pueden hacer pensar que te vas a desmayar. Y en cambio te llevas bien por un poco más que en una pizzería, ya que pasamos dos de nosotros en 34-36 €. ¡Muy recomendable!